Las oficinas de Gucci son una solución integral a lo que en algún momento fue una fábrica abandonada, proyecto a cargo del despacho italiano Genius Loci Architettura.

Desde el exterior se puede apreciar una fachada que explora múltiples tonos de ámbar en sus paneles corredizos a lo largo de sus cuatro pisos, los que funcionan como proveedores de luz y control climático, así como un aislamiento con el exterior para los diversos usos de las oficinas de la renombrada y lujosa línea de moda.

Las áreas están destinadas a las diversas necesidades del cliente, entre ellas, una sala de conferencias para 150 personas, una oficina de administración, áreas de trabajo, salas de estar, recepción y áreas de dispersión. Todos los interiores lucen un espectacular color blanco en acabados brillantes junto con cristales y negros opacos que matizan una magnífica ambientación.