La casa de moda francesa mostró su colección en el edificio brutalista diseñado por el arquitecto estadounidense Louis Kahn.

El pasado 12 de mayo, Louis Vuitton deleitó a la multitud con su nueva colección crucero 2023 con vistas al atardecer desde el Instituto Salk, ubicado en el condado de San Diego, California.

De acuerdo con el director creativo de la marca, Nicolas Ghesquière, el edificio fue seleccionado como escenario debido a que es un lugar “extraordinario” con vistas al Océano Pacífico “y la puesta de sol de California que brinda una inspiración infinita”.

Las notas del desfile decían: “El sol es el invitado de honor en esta colección crucero 2023. Juega un papel activo en la evolución de este vestuario donde los cambios de temperatura marcan un ritmo estilístico”.

Las modelos emergían del borde occidental del Instituto Salk contra el horizonte dorado y caminaron entre seis filas de asientos, mostrando las prendas más recientes de Louis Vuitton.

La colección se basó en el paisaje californiano, con cortes inspirados en los deportes acuáticos, que se combinaron con materiales naturales como el lino, la seda y el tweed.

El escenario de este año seleccionado por Louis Vuitton sigue a su tradición de presentar sus colecciones crucero en algunos de los lugares arquitectónicos más emblemáticos del mundo.

En 2017, la marca mostró su colección en el Museo Miho de IM Pei, en Japón.

El Instituto Salk se completó en 1965 por el arquitecto estadounidense Louis Kahn, y su nombre es en honor a Jonas Salk, investigador y médico que desarrolló la primera vacuna contra la poliomielitis.

 

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