Hermès una casa propia, un estilo de vida. Cuero, deportes y una tradición de elegancia refinada.
Hermès fue creada por Thierry Hermès en 1837, en París, Francia. Actualmente es una casa de moda, marroquinería, belleza y decoración exclusiva; inició siendo una tienda de sillas de montar y poco a poco fue ganando reputación por la calidad y elegancia de sus productos. Ahora es una de las principales marcas de lujo, especialista en accesorios de cuero.
La historia de Hermès está ligada a lo íntimo, acogedor, elegante, pero sobre todo a lo artesanal, al lujo y al mundo de los caballos. Emile-Maurice heredó la marca a comienzos del siglo XX, empresa que su padre habría colocado en el número 24 de Rue du Faubourg Saint-Honoré.
Fue durante un viaje por Canadá que Emile-Maurice encontró un artilugio denominado cierre relámpago, haciéndose de la patente, y comenzó a producir bolsos y prendas de vestir dando lugar a la popular cremallera. Años después, vendería la licencia a otros modistos como Chanel o Lanvin. Gracias a la contribución de Maurice Hermès, creció y se expandió a través de las colaboraciones que impulsó junto a algunos grandes artistas y diseñadores de la época, como Le Corbusier, los hermanos Giacometti o Sonia Delaunay.
Al paso de los años, la compañía ha conseguido mantenerse en manos de la familia. El Consejero Delegado de la casa, y nieto de Emile-Maurice, Robert Dumas-Hermès fue el responsable de la diversificación y expansión que ha vivido la empresa en los últimos 35 años, una compra del 35% por parte de la compañía de la firma de Jean-Paul Gaultier, de su contratación como diseñador.
En 1970, Hermès inauguró múltiples instalaciones por toda Europa, Estados Unidos y Japón. A pesar del aparente éxito de la compañía, Hermès comenzó a retroceder en comparación a sus competidores, quizá a causa de que solo utilizaba materias primas naturales para sus productos. Durante un lapso de dos semanas consecutivas, los talleres colapsaron silenciosamente.
Años más tarde en 1978, Jean-Louis Dumas-Hermès, hijo de Robert Dumas-Hermès, pasó a ser el presidente. Su principal colaboración con la marca fue renovar las áreas de seda, cuero y accesorios prêt-à-porter dentro de la empresa.
Jean-Louis aprovechó su experiencia como comprador de Bloomingdale's para ayudar a la compañía a revertir su situación. Contrató a los diseñadores Eric Bergére y Bernard Sanz para relanzar la colección de vestuario y añadir nuevos artículos. Entre las novedades estuvieron las chaquetas para motociclistas hechas con cuero de pitón, y los jeans fabricados con piel de avestruz, los cuales fueron apodados como "la versión más elegante de lo que Hermès ha sido jamás".
En 1997, se nombró a Martin Margiela, director creativo de la colección prêt-à-porter femenino. Se reportó que las ventas anuales en 1978 fueron de 50 millones de dólares USA. Al año siguiente, Hermès lanzó una campaña publicitaria que mostraba a una joven ligeramente vestida de denim y un pañuelo Hermès. El propósito era llevar la marca a una nueva clase de consumidores.
“Cuando formas parte de la quinta generación de Hermès, lo más importante es mantener la filosofía y ser fiel a los mismos principios que mi padre y mi abuelo… Sin embargo, se había convertido en una princesa dormida cuya belleza tenía encantado a todo el mundo. Necesitaba un príncipe que la despertase”, palabras de Jean-Louis Dumas.
A mediados del siglo XX, Christopher Lemaire fue nombrado director creativo. Dentro de los clientes de la empresa se encuentran Nicole Kidman, Julianne Moore, Elle Macpherson, Madonna, entre otros.
Christophe Lemaire presentó una colección dirigida a una mujer real, intimista y sobria que contó con un invitado excepcional, un halcón llamado Josephine. Según expreso el propio diseñador “Tenía que estar a un buen nivel, el de una casa maravillosa con una hermosa herencia, y un sentido único de la excelencia. Y tenía dos grandes predecesores, Gaultier y Martin Margiela”. En 2014 renuncia a su puesto de director creativo.
En el año 2014, Hermès estableció una asociación con la multinacional de productos electrónicos Apple con el fin de proveer correas de cuero de diseño exclusivo para sus relojes electrónicos de alta tecnología conocidos como Apple Watch. El lanzamiento tuvo éxito y permitió darle aun mayor visibilidad a la marca francesa en un nuevo mercado como el de los dispositivos electrónicos de vestir.